Desde hace meses, la curva de crecimiento económico en Jalisco parecía mantenerse firme. Sin embargo, el último reporte del IMSS revela un freno importante: en noviembre, el estado registró una caída del 18.3% en la generación de empleo formal respecto al mismo mes del año pasado.
En total, se crearon 11,929 nuevos puestos de trabajo, una cifra que, aunque positiva en términos netos, representa un retroceso frente a los 14,607 empleos generados en noviembre de 2024. Esta desaceleración contrasta con el panorama nacional, donde el empleo repuntó un 13.3% durante el mismo periodo.
Este cambio de ritmo no es menor. Jalisco había sido líder constante en generación de empleo, pero ahora ocupa el cuarto lugar nacional, por debajo de Ciudad de México, Nuevo León y Quintana Roo.
Jalisco y el nuevo termómetro laboral
La dinámica cambia, y con ella, los indicadores que solían ser predecibles. Empresas que antes apostaban por crecer su plantilla han comenzado a optimizar sus estructuras, en parte como respuesta a factores externos y reconfiguraciones del mercado.
Además, la cercanía del cierre de año lleva a una estabilización típica, pero esta vez viene acompañada de un cambio de estrategia entre sectores que solían contratar con mayor agresividad en el último trimestre.
El sector de servicios, históricamente uno de los motores de contratación, ha mostrado señales de enfriamiento. Lo mismo ocurre en el comercio, que pese al Buen Fin y la temporada navideña, no alcanzó los niveles esperados de contratación temporal.
Por otro lado, el campo tecnológico y manufacturero, aunque más estable, tampoco mostró el dinamismo de meses anteriores. Aun así, Jalisco mantiene 1.99 millones de trabajadores registrados en el IMSS, lo que lo consolida como la tercera entidad con mayor base laboral en el país.
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