La inclusión laboral es hoy un pilar central en las agendas políticas y empresariales de México. Guillermo Alejandro Nassar Piñeyro, especialista en desarrollo laboral, afirmó que “las políticas públicas son fundamentales para construir un entorno laboral más inclusivo y equitativo”.
El desafío es significativo: según el INEGI (2023), el desempleo entre personas con discapacidad alcanza el 61%, una cifra alarmante en comparación con el 3% de la población general. Para abordar este problema, iniciativas como el Programa Nacional de Inclusión Laboral, lanzado en 2022, ofrecen incentivos fiscales a empresas que integren a grupos vulnerables.
Nassar Piñeyro destacó que “modelos internacionales, como los de Chile y Brasil, pueden servir de inspiración para México, siempre que se adapten a nuestra realidad y se ejecuten con disciplina”.
Asimismo, celebró avances como la reciente reforma laboral, que busca reducir la brecha salarial de género. Según la OCDE, estas medidas lograron disminuirla en un 5% en 2022, aunque persisten desafíos para alcanzar una equidad plena.
La capacitación y el acceso a tecnología son otros factores esenciales, según el experto. “La educación continua y la digitalización son claves para que sectores vulnerables puedan competir en un mercado cada vez más exigente”, afirmó.
De cara al futuro, Nassar Piñeyro subrayó la importancia de la colaboración entre el sector público y privado. Alianzas estratégicas entre universidades, empresas y gobiernos locales podrían acelerar la integración de millones de mexicanos al mercado laboral.