Un relevamiento de CB Insight llamado “Las 12 razones principales por las que las que fracasan las startups”, destaca que los desafíos legales regulatorios son la quinta razón por la cual las startups no prosperan.
No disponer de la garantía de error cero en la gestión de riesgos puede derivar en la falta de confianza de los clientes e inversores, un pilar clave para aquellas startups que recién están saliendo al mercado.
Con respecto al último punto, en Latinoamérica, los números son poco alentadores: el financiamiento global al sector fintech alcanzó 75.2 mil millones de dólares en el último año -un 46 % menos que en 2021-, de acuerdo con CB Insights.
Prácticas ilícitas
Según una encuesta elaborada por Kroll, consultora global dedicada al control de riesgos, el 82% de las empresas han reportado un impacto «significativo» en sus operaciones debido a actividades ilícitas o conductas indebidas como el fraude, la corrupción o el blanqueo de capitales.
A su vez, una empresa con un proceso de compliance deficiente tiene más complicaciones para operar con agilidad, lo que la lleva a perder competitividad, la tercera razón de fracaso de acuerdo con el estudio señalado al principio. A la larga, toda aquella innovación que no es capaz de incorporar tecnología para ajustarse a las normativas y marcos legales termina en saco roto.