Comer caviar de saltamontes o galletas hechas con larvas de mosca negra ya no es una escena de ciencia ficción. En Argentina, cinco emprendimientos están cambiando las reglas del juego con propuestas alimentarias tan innovadoras como sostenibles, con la mira puesta en resolver uno de los desafíos clave del siglo XXI: cómo alimentar al mundo sin agotar el planeta.
La startup Tutut ofrece carne cultivada en laboratorio que reproduce la textura y sabor del pollo sin necesidad de criar ni sacrificar animales. Esta biotecnología permite generar tejido muscular a partir de células madre, reduciendo significativamente la huella ambiental. Por otro lado, Biomit se enfoca en aprovechar subproductos agrícolas para cultivar microhongos comestibles, convirtiendo residuos en una fuente proteica eficiente.
Tecnología con sabor: proteínas que no ves venir
El equipo de Protera está desarrollando proteínas a partir de fermentación de precisión usando inteligencia artificial. Su tecnología busca sustituir aditivos artificiales en alimentos masivos, mejorando tanto la salud como el rendimiento industrial. Estos avances son parte de una tendencia que gana fuerza en Latinoamérica, donde la innovación alimentaria ya dejó de ser una promesa para convertirse en realidad.
Insect Protein Company apuesta por el poder nutritivo de los insectos, creando harinas ricas en proteínas a partir de mosca soldado negra. Además, la empresa Entoprot innova con snacks de saltamontes deshidratados y productos gourmet como el “caviar de insecto”. Lejos de parecer extraños, estos alimentos ya cuentan con aval científico y normativo.
Cinco startups argentinas están creando proteínas del futuro con insectos, fermentación y cultivo celular. Innovación alimentaria en marcha.
Para seguir explorando, visita: EE.UU. amenaza con aranceles a la pasta italiana












