México 23 junio._ Tres buceadores tuvieron la idea de transformar al pez león, una especie invasora en un producto de alta gama: el cuero de pescado. La iniciativa podría ayudar a reducir el impacto de la moda en el planeta. Al mismo tiempo protege los arrecifes de coral y la biodiversidad en general.
Hay muchas y variadas alternativas al cuero tradicional. Después del «cuero creado en laboratorio» y del «cuero de hongos», dos importantes sustitutos del cuero animal, hay otro nuevo producto similar fabricado a partir del pez león.
En contra de lo que podría pensarse, podría ayudar a corregir un desequilibrio ecológico creado por un error humano hace varias décadas.
Se trata del ambicioso proyecto de una startup llamada Inversa, fundada por buceadores apasionados y que fabrica cuero a partir de esta especie invasora que destruye los arrecifes de coral. Así como cadenas alimentarias oceánicas completas.
Una amenaza para la biodiversidad
Originario de los océanos Índico y Pacífico, el pez león no representaba ningún peligro para los océanos hasta que fue introducido en el Atlántico, frente a las costas de Florida, por el ser humano, antes de proliferar para establecerse de forma permanente en varios lugares, desde el Caribe hasta México, Brasil y el Mediterráneo.
Sin depredadores naturales en su nuevo hábitat, el pez león ha creado un desequilibrio ecológico desde la década de los 90. La empresa Inversa afirma que solo uno de estos peces que resida en un arrecife de coral podría matar al 79 % de las crías de peces de arrecife autóctonos en cinco semanas.
Esta es una observación que varios buceadores estadounidenses, entre ellos Aarav Chavda, llevan haciendo desde hace varios años, al ser testigos de primera mano de la desaparición gradual de especies de peces de colores, así como de la destrucción de los arrecifes de coral.
En un intento por frenar la proliferación de esta especie invasora, crearon la empresa Inversa, que fabrica un cuero específico de pez león. Este es fino, pero resistente gracias a su estructura de fibras, que discurre en sentido transversal. El material se vende luego a marcas asociadas que fabrican zapatillas, carteras, cinturones, bolsos o incluso correas de reloj con este cuero de pez león.