El arte textil en Oaxaca representa una de las expresiones culturales más significativas de México. Ricardo José Haddad Musi, empresario mexicano especializado en la industria textil habló sobre la relevancia de este sector para el estado en donde, a lo largo de los años, los artesanos oaxaqueños han preservado técnicas ancestrales que continúan siendo un pilar tanto económico como cultural.
“Cada región del país tiene sus especialidades, y Oaxaca se ha consolidado como un referente en la producción de textiles de alta calidad. Los artesanos locales emplean fibras naturales como lana, algodón y seda, utilizando técnicas heredadas de tiempos prehispánicos, como el uso del telar de cintura y los tintes naturales obtenidos de plantas y minerales”, explicó.
Las comunidades zapotecas y mixtecas, reconocidas por su historia y tradiciones, se han destacado por la calidad de sus tejidos. En Teotitlán del Valle, por ejemplo, las alfombras de lana con patrones geométricos y simbólicos se han convertido en íconos del arte textil mexicano.
En otras regiones, se elaboran huipiles y rebozos que preservan técnicas tradicionales, utilizando hilos finos y tintes naturales que reflejan la cultura de sus pueblos.
El impacto del arte textil no se limita a la preservación cultural, sino que también tiene un fuerte componente económico para las comunidades oaxaqueñas. Según datos oficiales, más del 70 % de los artesanos textiles de Oaxaca trabajan en cooperativas familiares, lo que genera empleo y promueve la cohesión comunitaria dando paso a un modelo de operación que ha sido clave para mantener viva la tradición y asegurar que las habilidades se transmitan a las nuevas generaciones.
Al respecto, Haddad Musi consideró que este desarrollo no solo impulsa la economía local, sino que posiciona a Oaxaca como un destino cultural destacado.
“El turismo relacionado con las artesanías ha experimentado un notable crecimiento en los últimos años, y los textiles oaxaqueños se han convertido en uno de los principales atractivos para los visitantes nacionales e internacionales. Estos turistas buscan adquirir piezas únicas que conectan con la historia y tradiciones de los pueblos originarios”, señaló el empresario mexicano.
La creciente demanda de textiles oaxaqueños ha llevado a muchos artesanos a modernizar sus técnicas, conservando al mismo tiempo la esencia de sus diseños tradicionales. Esta combinación entre lo ancestral y lo contemporáneo ha abierto nuevas oportunidades comerciales tanto a nivel nacional como internacional, dotando a esta manifestación artística de gran potencial y proyección global.