Emprender es una importante fuente de empleo para los mexicanos. Sin embargo, el género sigue siendo una barrera para que todos tengan las mismas oportunidades de iniciar, mantener y desarrollar un negocio.
Si a lo anterior agregamos el factor STEM (acrónimo de las palabras en inglés: ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), el panorama se vuelve aún más complejo, sobre todo para las mujeres STEMpreneurs.
Cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en 2021, confirman la baja penetración del emprendimiento entre las mujeres, en donde solo tres de cada 10 pymes son encabezadas por ellas.
Y si acotamos aún más e incluimos la variable STEM, Endeavor indica que, en América Latina, solo una cuarta parte (25%) de las startups, es decir, empresas escalables con una base tecnológica, son dirigidas por alguien del sexo femenino.
Son justamente fechas como el 11 de febrero, día internacional de la mujer y la niña en la ciencia, las que buscan visibilizar una de las tareas pendientes de la sociedad: la escasa participación femenina en el rubro STEM, y cuyo impacto alcanza a áreas como la del ecosistema emprendedor.
Emprender no es una tarea sencilla, especialmente cuando se trata de una mujer que desea iniciar un negocio relacionado con la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas. De acuerdo con el estudio “Protagonistas del futuro. Emprendedoras STEM en América Latina” elaborado por WISE (Women in STEM entrepreneurship), las cinco principales barreras a las que se enfrentan las STEMpreneurs son:
Dificultad para obtener financiamiento
Falta de contactos o una red de apoyo
Falta de habilidades comerciales
Dificultad para construir vínculos de confianza que permitan acceder a nuevos mercados
Falta de equipo de trabajo
Fuente: emprendedor.com