México 26 diciembre._ Las empresas buscan pulir la última fase del proceso de envío –del punto de distribución a la entrega, conocido como la ‘última milla’–, pero para la startup Pikkop el secreto está en mirar hacia la primera.
El boom del comercio electrónico en pandemia volvió la entrega en un aspecto crítico. De acuerdo con un estudio de la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO) realizado este año, los tiempos de entrega son la segunda mayor área de oportunidad en los procesos de comercio electrónico, por detrás del bienestar de los paquetes. Incluso, un 30% de los encuestados está dispuesto a comprar en línea si mejoraran los procesos logísticos.
Ashish Punj, CEO de Pikkop, decidió voltear a las partes de la cadena logística donde, según él, aún hay un área de oportunidad. “Hay que entender que el problema no es la última milla, sino la primera. Hay mucha oportunidad en ello, y no quería competir con los gigantes. Entonces, entramos a ver dónde había un value chain que podíamos mejorar usando tecnología y buenas prácticas”.
El recorrido de Punj en logística comenzó con su interés de lanzar al mercado extranjero Royal Impex, un negocio familiar de ropa que internacionalizó en 1996 y llegó a mercados como Hong Kong y América del Sur desde el sudeste asiático.
Trayectoria
Posteriormente, colaboró en la creación de Entronic, una empresa especializada en tecnología y desarrollo de software para varias industrias con operaciones en Estados Unidos y Ciudad de México, antes de fundar Pikkop –inicialmente con el nombre de Envioo– en 2017.
Un año después, ya con su actual nombre, empezó las pruebas de un nuevo software operativo en la nube para hacer más eficiente su operación y ofrecer servicio en el segmento business-to-business. Para 2020, se adecuó la plataforma para el mercado mexicano, mientras que en 2021 sintetizó el primer cotizador para el cumplimiento de pedidos –también conocido como fulfillment– y un nuevo software enfocado en la ‘primera milla’.
Fuente: Expansión