Inversionistas temen que los aranceles de Trump causen un mundo de sufrimiento a las startups
A principios de año, Tom Drummond, socio director de la empresa de capital de riesgo Heavybit, con sede en San Francisco, se sentía ligeramente inquieto por el estado del mundo y por cómo la volatilidad política en Estados Unidos podría afectar a los mercados de capitales. ¿Y ahora? «Nadie sabe qué demonios está pasando», comenta a WIRED.
Drummond se refería a los llamados aranceles recíprocos del presidente Donald Trump, que hicieron caer en picada a los mercados mundiales cuando se anunciaron el 2 de abril.
Más tarde, Trump dio marcha atrás y suspendió los aranceles a la mayoría de los países durante 90 días, aunque se mantuvo el arancel del 145% sobre los productos chinos. No está claro qué ocurrirá cuando termine la pausa a principios de julio. «Hay tantas posibilidades de que se retiren estos aranceles como de que Trump se atrinchere», expresa Drummond.
Varios inversores de capital de riesgo que trabajan en pequeñas y medianas empresas dijeron a WIRED en las últimas semanas que les preocupa que los aranceles de Trump puedan ralentizar las inversiones en tecnología, desacelerar aún más un mercado ya lento para las ofertas públicas iniciales y, posiblemente, incluso dejar a algunas startups tecnológicas fuera del negocio.
Algunos inversionistas afirman que están planeando alargar sus ciclos de inversión y que buscarán vender sus participaciones en empresas privadas a otros gestores de activos. Otros señalan que, al menos por ahora, se mantienen alejados de invertir en empresas de hardware, que pueden verse particularmente afectadas por los aranceles de Trump.